Cariópside

La vecina cariópside ha temblado muchos fuegos. Es hora ya de enfrentar lo abrigado del mar, convidarle pedazos de luna al deseo.
No es temprano, no es nada, si aprieto los segundos en mi mano hasta sangrar por iluminaciones.
¿Cuánto azul se puede soportar
en una patada al mar de siempre
sin quedarse?
Por más gritos se encienden las caras,
son láminas lustrosas en vacaciones de arena
y se conocen entre sí,
como campos de cebollas que están ahí desde quién sabe cuándo
Antes no teníamos inventadas las miradas,
ni las perdíamos tanto;
solamente era cuestión de irradiar

Luz

Esfinge roja toda de tiempo
hacia sí de su ojo viene
clavando
alusión al lamento más puro
el de mis manos
Cuadros de soñarse adentro
como monedas en la fuente
rebotando

Río infinito al mostrarme el impacto del sol en mí
Quieras o no el espacio es inagotable
y tiene la imagen de la luz apilada

y de vez en cuando se desmorona todo y se levanta en otro lado

Momento en que todo gira y nada se mueve

A veces nos transformamos en el silencio, amuleto de los días que arrastran perfumes malditos por toda una habitación de cielos.

Más ásperos, inconclusos, nada nos aleja y parece que un viento nos arrebató la vaina de arvejas que llevábamos anclada.

La mitad de un escarabajo sangra.

Cabeza de espuma

Fugitivo
de la masa solar,
de la conciencia imperfecta cuando callamos

Recurro a una colecta de hojas
para impregnarme de albatros
Y así el cielo
¿De qué apagamos experiencia?
Me espanto cabeza de espuma
es insólito
se quiebra de sólo bajar el río
esquivar la piedra
tuve un sueño lo puse bajo un cubilete
y lo mezclé con otros
y nunca más volví a saber dónde estaba
Pero algunos petrificados
sabrán que allí creció un árbol
hacia abajo
Dormida en la barranca
protagoniza su jaula
como ninguna
o cae al vertedero de pediatras
Nacer que desaparecer

Gentileza del mundo

Ha parado la lluvia
frente al puerto
Caemos
Itinerantes murmullos con rítmico consuelo
Prefiero no pensar en lo perdido
hasta plantarlo

La luz estalla en mil partes pétalos luciérnaga
El recinto se llenó de pájaros
y es inconsciente
la torrencial memoria
que nos aguarda hasta que lleguemos a vivir

La escena de una noche líquida
escurriéndose entre unos dedos,
la ceniza magenta,
aprendizaje de una boca chorreada de miel
Es inquietante

Aparentar

Pensate
Dejá descansar al alma
Librate del mal, si no sabés para qué sirve
Una gran lágrima de pintura nos persigue entre las pezuñas del unicornio
Caigámonos de la Tierra,
pongamos fin al espacio

Heridos en el cielo

¿Ella parece una antorcha
o es esta sensación de vértigo continuo,
que la ensaya?
Ya nada puede inquietarme, como a una playa que pasó el día sedienta
Ah, lo de siempre

La vida no somos solamente ella y yo
Y cuando declaro esto parece que le diera más importancia de la que tiene
Una alcancía de libélulas
todo romper
Ni la magia, ni pedalear descalzo son infinitos
y el papel de espectro no me queda mal
si pido permiso al delirio para anidar en el cielo

Todo lo que se puede medir no tiene sentido
Me encanta que el destino descanse
o se vaya por la alcantarilla

El personaje que fui es eterno
pero el vacío para él es siempre bien elegido

En la punta del cielo

Yo nunca había venido
No sabía que existía
yo
Hoy quizás, que no hay noche, pueda conectar las visiones
que tuve y que tendré;
sin exactitud ni consuelo
Nada más que recrear los vestigios de lo que logra aturdirme,
lo que sangra y espero que nunca cure

Diviso
techos de fuego
lágrimas prendidas
en un íntimo flotar

Un retumbo de archipiélagos que nacen deformes
altera
y
descompone la música en imágenes
que para entrar a un beso
eligen

La distancia es un párpado rebelde
y se arroja y vuelve al mismo lugar

Los pedazos del mar en que ha volado

Pintalo de piedra

Hablás porque no hay noche,
que si no el césped te acorralaría
y te mecería aunque no quisieras
encontrarte con tus pasos
la alborada
que nos pesa y nos muestra como somos
tras la puerta imantada

Abre un círculo en el aire y sal
a perseguir un sueño
sin sentido,
si lo que hace mal es acomodar las venas,
contar pájaros dormir con las ventanas en el cuello

Lo que atrapamos

Simplemente estoy de paseo por la realidad,
y cuando me falta el aire desconozco hasta a las nubes
No almaceno recuerdos,
o por lo menos no lo hago conscientemente
No es porque duelan, es que quiero extinguir mi voz
y que me alcance el futuro,
la delicia de un cielo abismal que se abre como un cruce de caminos

No somos lo que atrapamos
Vivimos ahogados por no dejar espacio para expandirnos

En el interior del mar
hay una lámpara de ásperos gruñidos
que no sirve de guía
Solamente hay que llegar a ella,
frotarse las manos
y pensar
que por algo andamos a ciegas

Otro lado

Algo dejó relucir mi conciencia,
que no es bosque eterno
Ayer tiré toneladas de silencio,
y en la nube fosforescente se hicieron parpadeo
Transmitiendo la sed aullada
así volcamos en la noche y más allá
Otro lado no es salida,
no supone redención;
sólo aprovechar la cresta de la ola
para hundirse

¿Qué vibró inconmensurable
ante la sensación de ser
planicie y no dejarse ir?

Tal vez todo fuego se acumula
hasta dormir el púrpura
o hasta recrear las estaciones del día

En lo que dura la noche

Dedos de estrella
emprenden una fuga interior,
de esas que horadan el cielo creando mar
Escoltada por fantasmas
acelerás el rumor de la hierba
sin cortarla
Era mentira que el viento nos esperaba
Torres del llorarás...

No creíamos en el abrazo sin voz
que subyace deshidratado en la cosecha
de tanto carmín bajo los almanaques
Y a pesar de los inviernos inquietantes,
trago esta saliva que sana las distancias

Y si hoy no me encontraste
en la quemazón de alas
será que voló de sí
mi ebúrneo animal

De allí, solamente caer
Respiración invertida
Ser parte del cosmos acuático y
comprender que la zozobra de los elementos
es por lo que gritar cuando ardemos

Emoción bajo la lupa

Quiero llevarme esta luna y el río
y algunas marcas que no precisan nombre,
por estar cerca de las manos de todo el viento

Recién pintado el sol,
la lágrima se enrolla y deslizamos
una boca de estrellas impactadas
A casi una noche
de cuando habrá pájaros
Desde siempre fluye en una visión de lentejuelas

Por influjo de la naturaleza

Hemos llegado a un lugar
donde las nubes son rostros de porcelana que
con sus miradas obligan
a tiznarse con infundios de la mente;
donde todo conduce a
un volcán que te engulle
como pelícano de las
costas reverberantes de azúcar e Indochina
Cuidado con el Tigre
Suelta tu impresionante
rombo galáctico
de ella es multiplicada
Surcos de agua y caballos
lenta dispersión
la furia
entrega sus antenas
Por influjo de la naturaleza

Inmenso blanco

(La luz devasta las alturas)

La memoria de los rayos impresos en el aire
cedió a la fuga

El peligro de andar en uno mismo
y salvar un secreto para despistar
Brillitos empezando a ser matices intangibles de un atardecer
poblado
al azar
mirá el tacto de la fruta,
ese pudor incandescente
que aterriza
a

Dar otra vuelta
en una calesita voladora de cristal
con animales de verdad que ya escaparon

Un ojo amarillo abre lechos de ríos algodonados
cuando nos ausentamos del mundo
sin permiso las siestas infinitas
por doquier cantan iguanidades
a la punta del cielo
viniendo de realidades opuestas explosivas mordidas como la llama
que hace temblar a la flor de loto

El oficio de hacer cruces

Todos los ritos son invencibles y nunca vencieron a nadie
Las estrellas
solamente tienen alas
y hay que mirarlas a través de una lágrima
Así sabés que se expanden
que flotan
que gritan
Y si algún cascabel se moja en la distancia de no admirar el desierto,
finalizará la búsqueda
para naturalizarse
en lo que no es materia,
en el pequeño cosmos de una semilla de panadero
resaltando de fragilidad
Un espejo flotador de espejos
Hacia tu cántico azul

Leeré tus manos sin tocarlas y sin que las abra el sol
enredadera
Ojalá te enojes con tu sombra
por dormirse antes de tiempo

Tal vez así tomemos el ejemplo del bosque,
que miente y se emancipa
a través de la lluvia

Espejismos

(No me parece una buena letra, pero la pongo para facilitar la escucha de esta canción)

Desde lo más profundo me atrajo el silencio
Te dormiste y me quedé solo
A la vez la pradera te fue despertando
entre altares sin magia estancada

Y creí que un sentimiento se podría tocar

Yo sé que a veces me dejo llevar
por espejismos que atrapan los sueños

Conocernos hasta los silencios del río
Tirarnos abajo nuestras sombras
Zona de amaneceres en carneviva
Dolíamos porque éramos nubes

Y creí que un sentimiento nos podría salvar

Yo sé que a veces me dejo llevar
por espejismos que atrapan los sueños
Sobrevolando el Ártico del Sol,
una palabra es todo lo que espero

Te estás yendo
y podría detenerte,
pero el cielo misterioso me cegó

Olvido a

cántaros
tras el descenso de los ángeles
y no se puede pulir el deseo
En una parcela de nubes planeé mi destino
Sobre una escollera de nácar prendimos la fé de nada sirvió
Es una puerta abierta, que entre la paz róbotica, la estábamos esperando

Sin más preavisos de corte
Recuerdo la mañana en que unos pájaros
se llevaron mis manos
e hicieron con ellas un carrusel
que ahora despierta la voz del bosque
Por un camino de nácar
se ausenta la miel que echaron los años
hacia Estambul

Marioneta

Así sentimos la luna despierta en la abeja
Colosal capricho de tener raíces
bajo el agua
La perla, porque es sagrada,
se aviboró
Temerás esa ruina que cose los bolsillos,
que estrena una cornisa cada día
desde donde ver caer a otros

Hay ciertos Pegasos que quisieran saber
qué hay a la vuelta del espejo,
pero yo no tengo interés en bajar de los planetas

Absorbe

Cuando el alma se hace de piedra

desarticulada

sobre una caricia de agua

todo el caldo frenético de diversión nos pasma

Hormigas de bambú

nunca delinearon tan bien la noche

en la frágil

y compañera sombra

Vagar

Estas noches llaman a los diamantes
con sus latidos en compota
Si somos vértigos,
nos acurrucaremos de acuerdo
a los guijarros que caen del mundo
maravilladamente
No me sientas sufrir por las escaleras
Yo sé vagar sin advertirlo
Y es que nadie me hablará de tu pelo

Por primera vez me fragilizo
y nacen
estampidas de la lluvia
negros cristales
que erizan el silencio

Espera, por última vez,
y para eso realiza tu sueño...

Quemado el silencio

No he castigado el púrpura
al tenderme en un milagro
Prisionero de las mantarrayas
Único polen
inmensamente relleno de olfatos públicos
Pastito colorado
para inventar tensiones
lúdicas
Labios no sé qué

La mano

Piel incansable de musgo
a veces rojo
Libera la mano del mundo
con fiebre marfil
atestiguada por jardineros

Serás como muestra la lluvia

Islita

Atravieso tus palabras como pétalos
que son
armonía de besar pájaros
Y sí , a veces nos tiramos el mundo encima
y sospecho que después no queda nada

Terrenal como tu mano
No sabés decir no deseo
Y de cansarte explorás
radiado resplandor

Ruta de las aves, hoja de agua en mí
Limpiaré de locura toda mi sed

Nacido en un instante

Nacido en un instante
Recorrido polar impacienta ver tejer
algunos agujeros de personas
Tentempié en las nubes,
ya las luces
habitarán otro calamar

Encantaría tener un viento
en la piel,
agotándome y desagotándome
La plaza vacía es
todo lo que encarna maullidos
Das visiones a la recóndita caléndula
Y estando llenos de promesas lunas de oro

Apatía errática

Deseo disolver
lo que a todos nos sangra
y la pulverizada noche
Enfrentábamos las olas
con cuadros aún no pintados
Y si quisiéramos mirar adentro
mío
desde donde trinas
algunas palabras no concordarían
con despertar
Tampoco hay un rayo
adecuado a mis manos
No pienso y es tortuga

Alguna actriz favorezca nuestros destinos

Late

Llevarse de a poquito el mar
en cada lástima
Apretándonos las venas
con un bastón de rayo
Ternura aparte

Dame pálidas luces;
la carcomida carpa de extenuantes rezos
me vació por completo
Si aún me quedo mirando cómo
mi perro imaginario enreda los caminos

Algunos sueños se fueron,
pero entonces no valían la pena
Energías de todos los colores y búfalos
cromados
Es todo lo que pedimos,
no soportamos estar distantes del cielo

Cactus

Mira mis cactus

Son telas de juicio, semillas de amanecido

Nunca me soltaron a mirar

las joyas de egolatría que brotan durante

algún vendaval

Mira mis cactus

Los perdí en tus ojos,

cuando ni siquiera nos inventábamos nombres

Algún día pensaba dibujar en tu lengua

astromelias

Y vendrías a dominar el agua

a mi caleidoscopio hueco

Justo donde te dejé

Cobija para alumbrar sueños

Este cofre de las despedidas

liberó nuestras almas

donde nadie nos explica nada

y al correr somos nervios

Implacable luz preparando un abismo

(cobija para alumbrar sueños)

Amarillo río de palabras

cansadas de oler miedo

Dibujé un ojo que habrá sido

de algún tren que pasaba

Armonía sólo existe en el recuerdo

Como un lago

sentiré

Cobija para alumbrar sueños

Cobija para alumbrar

La espero y ya es de día;

con su vuelo dormía mis miradas

Despojado

de cielo,
tumbando las piedras que zumban a mi alrededor
Un hambre nació
No de fugarse, ni de invadir lo embebido
Calesita que no pudo volar
tanta violencia
Cómo albergar millones de células de vapor encantado
en una flor
más si es sedada
por escudos íntimos?

Acordarse
de todo lo que falta vivir

Vendas en los pómulos

Y en los pliegues de este instante

encenderé un haz mortecino

para completarme en un puñado

de tallos de sonrisas

Nada me queda por navegar

de estos gustos inaccesibles

No soy un hogar,

menos un viento increíble

Las pulpas que me diseñaron

vienen a adormecerse a mi lado,

como si no tuvieran frío

de tanto replegarse en la penumbra

Los mensajes para los pastizales

hablan de caer y frotar la niebla:

muestras imposibles de dolor

por dentro de la desnudez

Ya lo que llegó más lejos

es desidia;

sin embargo en sus ojos hay memoria

de un quejido rancio

adorado por los anodinos;

cáscara de licuado de voces de mono.

La ignorancia todo lo sabe,

se resume en arenas movedizas.

Vista

Vamos a tatuar la lluvia

Y nos quedaremos con el plato vacío

esperando

una manía

de concordar en las madrugadas

Si algunas vez me atreví a usar tus manos,

ahora las descanso

Alucinación

Planeta de cuarzo

Cadenas metidas en la piel y sobresaliendo

entre los muertos

No creas que estás sola con el silencio

El fuego siempre es nuevo

Pájaro de vidrio

¿Tiene sentido un pájaro de vidrio patinando sobre la costura de mis uñas? ¿O soy yo el rechazado por espejos, el que vacía desembocaduras y se cree tiernocapazdeolvidarnoteapuresamorir? Mejor me sueldo los cabellos con truenos. Sombras sin luces.

Hay túneles en mis ojos cerrados, piruetas de mis arrugas bajo tierra; lo que nunca ha de sentir me quiebra. Este deseo de acabar con todo o de absorberlo todo, mi cerebro sin paracaídas, la fantasía sin hadas, una manifestación a favor de la soledad. Pero un enorme trampolín a mis espaldas no permite que me caiga.

Se largó

Se largó el sol
a través del desorden que tan bien nos hace
Poderoso insomnio caminaste
Libélula manchar
girando sobre sí misma luz
La Tierra escapa a tu corazón,
se late sola

Querríamos una estampida de pensamientos por campos verticales

Sólo hay que brindar por la nube mal hecha

despreciada

o lo fantasmal

desnuda

Al menos toma un tiempo olvidar

todo recreo de piel

duerma semilla escondida de hacer camaleón

Pierda su esencia no tiene arboleda

Columpiados

Si tan sólo provocar una tormenta...
Desprolija preciosidad
Batir los ángeles en un bol con cerezas
no nacidas
Todo eso nos pasó por esquivar el fuego o la penumbra
ninguno los dos
nos asegura
que sabremos ser el pájaro
tortugués

Aromar de lluvia,
subitez de la memoria todavía no creada
Piélago de inocencia que adónde nos lleva

Me abriga cuando tarareás nuestra fantasía
eclipse

La pérdida del diluvio

Acudieron los gnomos
al lugar del instante
Ciertos pájaros se entrenan para enmudecer
con la tarde

en los párpados

Numerados milagros no conseguirán espantarnos
Porque antes de esto, hubo una búsqueda
De preciosa y lúgubre deformidad

Ahora suelo ser ventanal
Como una brisa que deja pasar

entre los labios

Pero si no hay magia, reventaré

Yo no te hice azul

Solamente tus pasos entrecortados por la rabia
Esperábamos que cayeras de las nubes
y algó tocó el tacto y temblamos
Patos, patos y más patos,
hasta cubrir el cielo
de no miradas
No pudimos encontrarnos;
alguna sombra nos mordió
en los pétalos
No debimos hacer pétalos de sombra
Nunca quise hacerte azul
y apareciste
por toda la lluvia

Sunset in you

Alguna vez creo haber visto
el atardecer en vos
Y se fugaron los colores
Y no había nadie para decirme
que los mundos se visitan de a uno
El agua es despertar, cuando todo lo vemos con las manos
Quizás nos rodeamos de mística pura y la flecha fue a parar al infinito
Igual, somos y visitamos el humo
tantas veces como la mente nos permite
desaparecer