lunes, 28 de julio de 2008

Sube al jardín

Contener el viento, algunas ironías de inquirir ojos
Así la penumbra enumeró el infinito y sonrió

domingo, 27 de julio de 2008


Igual vendría siendo niño
a encender y arrastrar
luces en los cuerpos sólidos
¿Hasta siempre dormirá el agua
entre cascabeles de locura?
¿Y para qué se embrollan nuestras voces
como gasificadas por el tiempo?
¿Pasarán luego a desgajar
el ultramar en las miradas
de rigurosas y templadas
pléyades?

¡Podrías morir hoy en la tibieza!
¡Podrías nacer hoy de un suspiro!

Afuera el mar se despereza
y prospera un balcón
que infla de color la redención
¿Ves aquellas masas congeladas
en la fiesta de adorar pepinos?
¿Estarán hundiéndose en el barro
antes que el sol depare sobresaltos?
¿La modorra que los encantó
reclamará para sí los rastros
de prodigiosos trapecistas
de Gaudí?

Florecer y morir

¿Vuelvo algún día a serme árbol de tu semilla?
No sé aún si ayer ya lo existí
Mis ramas diezmadas de sol
se enredan con vos,
una burbuja
Nada importa en hoy
Florecer y morir

9 - Cielobar


Mi espíritu no sigue la secuencia
Recrean mis manos en la torta
escasos tañidos de campana
y encuentran una pista en la mañana
mientras mi piel de otras se desglosa
queriendo deslizar las apariencias

Mientras aquí lo ausente no exista
apuesto a que nada de hoy se salva
de la lava que nunca jamás llora
el volcán saturado de auroras
Entre los árboles ciegos y las parvas
habrá caído el magma que lo excita

Aún no sé qué traerá el nuevo día
Quizás un simulador de amebas
Un espejo curvo del pasado,
elitista y rodeado de mancebas

Si todo en el estómago se mezcla
que vengan centuriones a decirme
que la sangre corre fuera de mis venas
Igual no tomaré la última cena
ni iré presto de blanco a vestirme
Seré yo quien a la bestia detenga

El cielobar de piras discontinuas
es donde se adelantan los relojes

8 - Flotando como la nata

No hay espadas de rubí, te lo aseguro, que puedan cubrir mi desencanto.
Ha de venir en canto rodado, suprimiendo la llanura, tal como lo hicieron circunspectos espartanos.
No les debo nada y ellos no me deben nada que no sea traición. Laberintos para despegar de todo lo terreno.
Avizoro el tornado escurriéndose sobre las cabezas aladas que han abandonado sus estancias. Es una gran gelatina morada que ahuyenta los miedos que las siluetas vacías generan desde el horizonte.
Busco piedad en mí y no me encuentro. Solo.

7 - Abrigo

Ese abrigo no ilumina la noche
y oscurece la mañana
Todo lo imprudente se reseca
en la angustia de evocar
mapas del infierno,
nevadas que indujeron al desprecio

Las pedradas a los jardineros
los hacen suprimirse unos a otros
Mezcla de molestar y desazonarse,
poroso ventarrón que deja pasar los instantes olvidados,
lunas enfermas de refregarse las manos en los ojos
Los ojos todos

6 - De las desventuras de doña Plácida y Cabizbaja, y de cómo su marido Quisquilloso se mandó a mudar

Y el bisonte me dirá:
¿Por qué simulaste la belleza
socavada tras una mampara?
¿Te aburriste de menospreciar
las incógnitas que los ángeles
doman en cautas bañaderas?

El dolido humus
me atraviesa como una medalla
que sabías debajo del mar
¿Cuál es tu dulce cristal boreal?
¿Cuál es tu tristeza que llorada no limpia?

5 - Nube Cascabel

Desafía sinuoso velo
trazado por castores
Alucinemos la suave carnada
mitad del rebaño
Si impacté en helechos fulgurantes,
amaré tu silencio que cabe en la
noche
La luz fría aclimata sensaciones
que embisten unas a otras
produciendo
albores eternos
Nube dominante o tierno cascabel

4 - Piedra adentro

Inocencia que limpia los rayos
Piedra adentro
todas las vidas del amanecer
caminaste en la oscuridad rural
además de desear cielo
Sin lamento es la guarida
de agitar alas

Néctar parecido a contraer fiebre
entre luces que cautivan sólo por cautivar

Lenguaje insonoro
Madejas enredadas y un desierto en común
Todo lo que pedíamos callar
fue apresado en la batalla por los sueños
y en algunos arrecifes perdimos el miedo
a ser distintos
a dejarnos llevar por la espesura
capilarizada

3 - Brillando de treguas

Son tantas las penas
que no puedo mostrarme avaro
Pienso que algún día como soy
volaré
hacia altos valles incendiados
No sirve ocultarme en la miseria
para acaparar pisaflores
Me habré hundido en descalabros
y afiebradas confesiones
cuando pierda el sentido del portazo

Brillando de treguas,
lucro con la soledad del alma
Descascarando la noria
en satén
detecto algún fuego cerúleo
nublando
los sepias
mi amanecer

2 - Llenar la forma

La polea arrepentida deja de extraer ensueños
Ya no es la sierva de mirarnos Que hasta suscita
contingencias en la bruma
Ejecuta rezos sin sentido mientras no puedas
Cuando esté permitido ya tendrás un desafío
Aflicciones se resienten

Fuera de lo inesperado el rojo del alma vuelca su esperma
a una mente aturdida; y es así que no consigue
estar sino desesperar
Los colores son acciones y los sueños son porqués
Debo saber si agrietar es frustrada libertad
Rojo pulso decadente

No hagas más invitaciones al espejo,
que al destino ha venido
a llenar la forma
como algo ya previsto

1 - Hacia un fuego inocente

La vida nos retrata cruelmente
bajo disfraces eternos
que aglutinan las luces de los cobardes
Vení a cantar en mis alas
No hay sirenas que doblen el aire
justificando la inercia
Seré para vos el invierno
de rasguños suaves
y así la deslucida imagen
de antaño ya no se filmará
como traición de aforismos

En cuclillas espero al destello amorfo
que nos haga arremolinar
en torno a los colores
de todo castigo

Paciencia pedimos ahogados

LA VIDA NOS RETRATA CRUELMENTE

A continuación una serie de 9 bosquejos raramente conectados...

viernes, 4 de julio de 2008

Otra forma

Otra forma es no mirarse
despertar
y así se espanta el volumen alto desangrándose
que de a poco nos queda toda la intuición desperdigada
entre locas colmenas
Sin un viento no es posible olvidarse;
vamos a tomar el próximo